El papa Francisco recibirá este domingo 23 de marzo el alta hospitalaria, después de 37 días ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma por una infección respiratoria, y regresará a su residencia en la Casa Santa Marta en el Estado de Vaticano, anunció este sábado el doctor Sergio Alfieri, jefe del equipo que le trata en el centro médico.
El sumo pontífice “será dado de alta mañana, (donde se encuentra) en estado estable y favorable desde hace más de quince días. El periodo de reposo en la Casa Santa Marta continuará y permanecerá en convalecencia por un periodo de aproximadamente dos meses más”, manifestó Alfieri.
Jorge Mario Bergoglio conocido también como el Papa Francisco, de 88 años de edad, ingresó desde el pasado viernes 14 de febrero en el hospital Gemelli de Roma por sus dificultades de respiración, que resultaron deberse a una bronquitis por infección polimicrobiológica a la que se sumó a una neumonía bilateral.
“Cuando un paciente tiene una infección de esta clase y ha estado en un estado muy grave, los progresos ulteriores es mejor hacerlos en casa” porque “el centro médico es el peor lugar para continuar la convalecencia, ya que es donde más se pueden contraer infecciones”, dice Alfieri.
Señaló que “la mejoría ha sido lenta, pero constante”, lo que ha permitido el alta, y resaltó que “nunca ha estado intubado y siempre ha estado consciente”, a pesar de las varias crisis graves que sufrió durante su prolongado periodo de hospitalización.
Los médicos del Hospital de Roma explicaron que “las infecciones de mayor gravedad” se han resuelto, pero deberá seguir con el tratamiento farmacológico y de rehabilitación durante al menos dos meses más.
“En Casa Santa Marta continuará con la terapia motora y respiratoria que ha hecho en el hospital, en este momento es lo más importante y lo que necesita para recuperarse”, manifestó, por su parte, el doctor Luigi Carbone, el médico de la Dirección de la Sanidad del Vaticano y que es el responsable de la salud del sumo pontífice.
Este sábado 22 de marzo, el Vaticano anunció la intención del Papa Francisco de asomarse este domingo desde la ventana de su apartamento en el Gemelli, en la que será su primera aparición pública desde su hospitalización y tras la cual abandonará el hospital.
Desde su hospitalización, su cuadro clínico siempre ha sido calificado de “complejo” y fueron necesarios 25 días ingresado para que los médicos levantaran la reserva de su pronóstico, al considerar que su vida ya no corría “riesgo inminente”.
En el último parte médico, el pasado jueves 20 de marzo, se confirmó que se le había suspendido la ventilación mecánica no invasiva, la máscara de oxígeno que empleaba por las noches, mientras que el oxígeno de alto flujo con cánulas nasales durante el día también se está disminuyendo de forma gradual.
