Tras dos años de restricciones y una intensa batalla legal, el Aguardiente Amarillo de Manzanares, producto de la Empresa de Licores de Caldas, volverá a circular legalmente en Bogotá y todo el departamento de Cundinamarca.
La determinación fue oficializada el pasado jueves 5 de junio mediante la Resolución No. 00000793 expedida por la Secretaría de Hacienda de Cundinamarca, que autoriza su venta y comercialización durante los próximos diez años.
Este regreso marca un punto de quiebre en la historia reciente del monopolio de licores en el país, luego de que la Corte Constitucional, el pasado viernes 4 de febrero, declarara inconstitucionales las restricciones impuestas por los departamentos a la comercialización y venta de aguardientes de otros departamentos.
Con este fallo se garantiza la libre competencia y se desmonta una práctica que, durante mucho tiempo, protegió intereses económicos departamentales en detrimento de la oferta para los consumidores finales.
El Aguardiente Amarillo es especialmente popular en Bogotá, una ciudad que representa uno de los mercados de licor más grandes de Colombia, con un consumo anual estimado en 15 millones de botellas.
Sin embargo, en el año 2023 su distribución y comercialización fue revocada, afectando tanto a productores como a comerciantes y consumidores finales, quienes veían limitado su acceso a una de las marcas más queridas de Colombia.
La medida tomada por la Gobernación de Cundinamarca no solo permite la reintroducción de este producto, sino que responde al mandato constitucional de permitir la libre circulación de bienes en todo el territorio nacional.