Las precipitaciones ocurridas durante el fin de semana, que afectaron la realización de varios eventos culturales y puso en evidencia el manejo que se le ha venido dando a las basuras en la ciudad de Bogotá, no solo afectaron a la capital de Colombia, sino que también dejaron inundaciones en el caso del departamento de Cundinamarca.
Viotá, municipio que queda a tan solo tres horas de la capital de Colombia, fue de los que más afectó por los embates de las lluvias. De acuerdo con el alcalde del municipio, Óscar Quiroga, noventa familias (cerca de quinientas personas aproximadamente) se vieron afectadas por el colapso del sistema de alcantarillado y siete de los catorce barrios del casco urbano del municipio sufrieron inundaciones, siendo Gaitán uno de los más afectados.
De acuerdo con la Unidad de Gestión del Riesgo de Cundinamarca, las intensas lluvias también produjeron que la quebrada San Juan tuviera una creciente súbita que afectó gravemente a viviendas y al hospital municipal.
El alcalde de Viotá, Óscar Quiroga, indicó que existe una propuesta de construir un muro de contención para evitar nuevas inundaciones. Al respecto, dijo que la etapa de estudios y diseños se ha venido desplegando por más de cinco meses y se espera que las obras inicien este año.
Sobre la crisis en otros municipios de Cundinamarca, el gobernador, Jorge Emilio Rey, comentó que hubo un desbordamiento de la quebrada La Gata, en el corredor Girardot-Tocaima, en el sector de Pubenza, que afectó varias casas en esta vereda. Así mismo, en Silvania hubo un taponamiento en la red de alcantarillado, afectando a seis casas.
Jorge Emilio Rey también afirmó que para atender la situación de inundaciones en el municipio de Viotá, Empresas Públicas de Cundinamarca apoyará con equipos Vactor la remoción de agua acumulada desde este lunes 31 a las ocho de la mañana, así como la llegada un equipo de maquinaria amarilla para atender seis zonas de afectación sobre la troncal.